restoring our biblical and constitutional foundations

                

 El Camino para Auto-Apoyo según Tesalonicenses

 David Alan Black  

“¿Cuál es, entonces, mi recompensa? Que al predicar el evangelio, pueda ofrecerlo gratuitamente sin hacer pleno uso de mi derecho en el evangelio." (1 Corintios 9:18)

La Biblia dice que no podemos amar a Dios y al dinero al mismo tiempo. Debemos amar uno y odiar el otro. No es término medio. Los caminos del mundo constantemente se arrastran en nuestros pensamientos acerca del dinero, aun cuando nosotros somos cristianos. Desde la niñez más temprana aprendemos que el dinero es esencial para nuestra felicidad, y cuanto más tienes es mejor. Esto toma mucho esfuerzo para olvidarse de lo aprendido con este concepto falso. Como Jesús dijo, debemos de hacer como niños pequeños otra vez si queremos estar eficaces en el Reino de Dios.

No puedo decirle cuantas veces he escuchado el ministerio pastoral descrito como “una profesión.” Durante casi 35 años de enseñando en universidades cristianos y seminarios, he visto a estudiantes obtener el título de Maestría en Divinidad para ninguna otra razón que estar suficientemente “acreditados” para ser contratados por una iglesia local. De algún modo nuestras riquezas nos ciegan a los principios básicos bíblicos. La iglesia en América es particularmente bendecida. Los pastores a menudo tienen mejores salarios que muchos de sus feligreses. Dios ha hecho los Estados Unidos la nación más rica sobre la tierra. A los que más dan, también se le exigirá más. Creo que Dios está comenzando a pedir una contabilidad de la Iglesia Americana de cómo hemos usado Su dinero.

A todos que lo siguen a Él, Jesús les dio básicamente el mismo mensaje. Debemos voluntariamente aceptar la incomodidad, el sufrimiento, la incertidumbre. Ningún genuino seguidor de Jesús puede poner  la comodidad, los lazos familiares, o la seguridad delante de Su Reino.  Jesús  nunca  pidió perdón por llamar a sus discípulos a una vida de sacrificio. En todo el Nuevo Testamento usted encontrara que los que siguieron a Jesús a menudo pagaron un precio muy alto, aun con sus vidas. Tal persona es el apóstol Pablo. El busco servir a Jesús y esto le costó todo. No solamente el dejo todos sus privilegios de su educación judía, el rindió sus derechos como un apóstol cristiano para sostener su ministerio de plantando iglesias. La Biblia dice que él trabajo voluntariamente con sus propias manos de noche y de día para no ser una carga financiera a otros cristianos. Pablo ejemplifica que es el verdadero ministerio cristiano. Es un sacrificio positivo para el bien de otros. Su vida es ejemplo de la actitud apropiada que un servidor de Jesucristo debería de tener hoy en día. Su enseñanza sobre auto-apoyo se burla de nuestro “Cristianismo de supermercado” (Esta expresión significa cuando la gente va al super y compra únicamente cuando necesita).

Antes la iglesia antigua tuvo ministros quienes demostraron este tipo de servicio sacrificial como Pablo. Y ahora, la iglesia moderna tiene ministros profesionales. ¿¡Qué paso!? Este cambio  de paradigma radical ocurrió a principios de la historia de la iglesia. Dentro de 300 años después de la resurrección, la iglesia de Jesucristo comenzó a mirar el Antiguo Testamento para sus modelos de ministerio. Comenzó a combinar el Reino de Dios con los reinos de este mundo. Esta nueva forma de cristianismo, un hibrido — a menudo llamado el “Compromiso de Constantino” debido al papel que el Emperador Constantino  jugo en su desarrollo — comenzó a dar clases que Dios había instituido distinciones  sociales entre cristianos. En el cristianismo del Nuevo Testamento, todos los creyentes son sacerdotes y pidieron servir en el Reino en una buena forma y voluntaria. Esto es verdadero aun de líderes de iglesia,  a quien  Pedro exhorto, “Has tu trabajo, no por la paga, sino de un verdadero deseo de servir. No trate de dominar a los que han sido puestos a su cuidado,  pero sea ejemplos a él rebaño” (1 Pedro 5: 2b -3).

Con el advenimiento del cristianismo de Constantino, no obstante, todo esto ha cambiado. Por el contrario tomaron cada aspecto de la enseñanza de Jesús literalmente y seriamente,  líderes cristianos comenzaron a ver  el ministerio mas como una profesión que como un acto de servicio voluntario. La Iglesia llego a ser clericalizada, profesionalizada e institucionalizada. Cristianos ya no aceptan la servidumbre voluntaria como normativa. Creo que una de las razones de que Dios llamo a Pablo para ser un apóstol es por que el sabia que Pablo podría ser un ejemplo para nosotros. El fue “el primero de los pecadores” (1Timoteo 1:15), no obstante por el poder del Espíritu Santo él vivió una vida increíble. En cualquier parte donde él fuera, las personas no podían olvidar su ejemplo y el impacto que él hizo en sus vidas. Para mí, esto es una de las cosas más alentadoras sobre la vida de Pablo. Usted ve, Pablo fue un vaso corriente como usted y yo. En 2 Corintios 4:7 el nos dice, “Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la extraordinaria grandeza de poder sea de Dios y no de nosotros.” Aquí tenemos a un hombre  cuyo mayor deseo era de vivir como  un humilde sirviente del Señor Jesucristo. La pregunta para preguntar es, ¿Usted y yo estamos dispuestos a hacer lo mismo?

Pablo fue el misionero que  hizo pionero  el evangelismo  y la plantación de las iglesias en toda la parte del Mundo Mediterráneo. Que reproche su vida es a la desobediencia y la avaricia de muchos cristianos e iglesias hoy en día. Necesitamos redescubrir de nuevo su método de hacer el ministerio si queremos lograr la salud financiera hoy. Creo que sus instrucciones a la iglesia en Tesalónica nos presentan con un modelo inconfundiblemente claro de ministerio. Como usted lee estas instrucciones mi esperanza es que usted llegue a realizar que el ministerio de auto-apoyo  no es únicamente bíblico pero sano. Pablo nos muestra que el mayor gozo en el ministerio es no constituido en bienes materiales. De hecho, uno puede aun servir a Jesús en pobreza completa. En cambio, el gozo en el ministerio es constituido cuando recordamos las palabras del Señor Jesús, que dijo “Hay mas felicidad en el dar que en el recibir” (Hechos 20:35).

La enseñanza de Pablo acerca del ministerio de las finanzas es encontrada en varios pasajes en  1-2 Tesalonicenses que ahora brevemente examinaremos. Como diferente este modelo de ministerio de los métodos que se hacen pasar como bíblicos en la iglesia de hoy. Cuando miramos la vida del apóstol Pablo estamos asombrados en como el considero trabajar para vivir.  El ministró entre los Tesalonicenses con su propio dinero, aun cuando él tuviera el derecho de ser apoyado por otros. El paso todos los días y noches  trabajando para no ser carga a otros. La tragedia de nuestro día es que son pocos los seguidores de Jesús  que tienen la carga para seguir este ejemplo. Para entender el método de Pablo de la auto-ayuda, debemos de iniciar con sus palabras en 1 Tesalonicenses. 2:7-10:

Más bien demostramos ser benignos entre vosotros, como una madre que cría con ternura a sus propios hijos. Teniendo así un gran afecto por vosotros, no hemos complacido en impartiros no solo el evangelio de Dios, sino también nuestras propias vidas, pues llegasteis a sernos muy amados. Porque recordáis, hermanos, nuestros trabajos y fatigas, cómo, trabajando de día y de noche para no ser carga a ninguno de vosotros, os proclamamos el evangelio de Dios. Vosotros sois testigos, y también Dios, de cuan santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes.

Cada cristiano que está preocupado sobre la vida espiritual de la iglesia en América debe de leer y releer este pasaje. Lo que Pablo dice es asombroso. En vez de pedir el apoyo de sus consiervos,  que era uno de sus derechos como un apóstol, Pablo gozosamente y de buena manera se apoyo en sí mismo cuando él estuvo en Tesalónica. Aquí está un hombre sumamente culto, brillante que lucha por lograr vivir haciendo el trabajo manual. El verso clave que explica el motivo de Pablo es 1 Tesalonicenses. 2:10: “… para no ser carga a ninguno de vosotros, os proclamamos el evangelio de Dios.” “¡No ser una carga!” ¿Le hace esta declaración sentirse un poco incomodo? La mayor parte de los misioneros hoy en día nunca pensarían ir al campo de misión sin primeros ser apoyados (económicamente). Por supuesto, tal apoyo no es malo. ¿Pero, por que este dinero no podría ser usado para apoyar a los ciudadanos extranjeros quienes  tienen la mejor capacidad de alcanzar sus naciones para Cristo? ¿Por qué este dinero no podría ser utilizado ayudando al necesitado o proveyendo asistencia médica para el necesitado en el nombre de Jesús?

Algo está muy mal cuando nuestros misioneros extranjeros no han considerado aun la posibilidad de hacer trabajo manual—como Pablo quien hizo tienda de campaña. Pablo sabía que esto no era correcto para él  iniciar ser una carga financiera sobre sus consiervos cuando él podía trabajar  para poder vivir. Hasta que nosotros aceptemos olvidarnos de nosotros mismos, como Pablo hizo, nunca veremos la Gran Comisión cumplida en nuestra generación.  Siempre nos encontraremos a nosotros mismos siguiendo el modelo financiero de dependencia que se convertido la costumbre de nuestra cultura misionera. Estoy convencido que uno de los motivos principales que no estamos alcanzado el mundo para Cristo hoy en día es nuestro rechazo de seguir el ejemplo de Pablo. Sentimos que no podemos ser misioneros a no ser que nosotros seamos apoyados económicamente por otros. En la luz de todo esto, hago una pregunta simple: ¿Cuando Dios cambio su modelo de hacer el trabajo de misionero?

Este concepto de auto-apoyo es desarrollado en nuestro siguiente pasaje, 1 Tesalonicenses. 4:11-12. Si hubiera cualquier duda de la alta visión de Pablo para el trabajo, esto es disipado en este texto. Aquí el manda a los creyentes de Tesalónica:

Haga su objetivo de vivir, una vida tranquila, ocúpate por tus propias cosas, y gánate  tu propia vida, tal como les he dicho antes. Por hacer esto usted ganara el respeto de los no creyentes, y no tendrá que depender de nadie para sus necesidades.

Hay pocos pasajes en la Escritura que son más claros que este. ¿Es esto en lo absoluto sorprendente que  soy un defensor  de misiones auto-apoyadas? Hay muchos modos prácticos de desarrollar esta enseñanza. Al menos podemos todos estar de acuerdo que la negligencia  y la  pereza  no tienen ningún lugar en la vida de un cristiano.  Cada persona sana debería de ganarse su propia vida—un punto que Pablo enfatizo una y otra vez cuando él estaba en Tesalónica. ¿Por qué debería este principio hacerse inválido solamente por que una persona que hoy entra en el “Ministerio Cristiano a tiempo completo?” Una elevada ética de trabajo es no reservada únicamente para “laicos.” Es para cada creyente, sin importar su llamado, sin importar su vocación, y sin importar sus circunstancias.  Dios ha ordenado que nosotros demostremos al mundo lo más altos estándares de la responsabilidad personal.  El desea para nosotros tener el mente nuestro propio negocio y trabajar para vivir. Si no lo hacemos, perderemos el respeto de los no creyentes, sencillo y simple.

Cuando yo estaba en la universidad, un buen amigo mío se fue a un seminario y luego decidió ir a Japón bajo los auspicios de un consejo de misiones extranjeras. Su experiencia tuvo que ser la mayor pesadilla de un misionero. Y necesito decir su historia aquí por que pienso que esto ilustra intensamente lo que Pablo estuvo tratando de ensenar a los creyentes de Tesalónica. Como cada otro misionero enviado por este particular consejo de misión, mi amigo primero necesito preguntar por apoyo financiero para el vivir allí. Después de un largo y arduo proceso de recaudación de fondos, el llego a Japón, donde su misión fue de alcanzar hombres de negocios japoneses con el Evangelio. Durante 4 años el trabajo en vano. Ni una sola alma fue convertida, ni una iglesia plantada. Y la razón  rápidamente se hizo dolorosamente obvia. Las noticas es que él era un “misionero asalariado” estuvo un obstáculo insuperable a estos hombres trabajadores japonés de negocios. Ellos simplemente no podían creer que la persona  que hablaba a ellos  no estuvo remuneradamente empleada. Enormemente desanimado, mi amigo dejo el campo de misión, regreso a los Estados Unidos, y renuncio del consejo de misión. Después, el inmediatamente regreso a Japón y consiguió trabajo en una empresa japonesa que se especializada en ensenar ingles a hombres de negocios japoneses. Dentro de unos meses el había conducido a varios de sus estudiantes a Cristo, y finalmente se formo una iglesia pequeña. Mientras tanto, él había aprendido a hablar el japonés fluido y luego se caso con una japonesa.

Creo que puede haber gente leyendo estas palabras quien Dios ha llamado para ir  a las “partes extremas del mundo.” Estoy convencido que Dios quiere enviar en adelante miles y miles de creyentes de nuestras tierras. ¿Ha doblado usted sus rodillas y ha preguntado a Dios como el podría usarlo con los regalos y habilidades que él le ha dado como un “Tentmaker” como Pablo? La expresión “tentmaker” significa como Pablo se auto-ayudo en el ministerio haciendo tiendas de campanas. “Tentmakers” son increíblemente efectivas. Su trabajo proporciona una entrada natural para el establecimiento de una red de relaciones en las cuales la semilla del Evangelio pueda ser sembrada. El más significante, en compartiendo su fe, usted nunca puede ser acusado de “persona pagado por hacerlo.”

Algunas personas podrían oponerse por decir, “Cuando Pablo dice nosotros debemos de ganar nuestras vidas,  seguramente el esta  excluyendo  el trabajo de tiempo completo de pastores y misioneros asalariados.”  A esto tengo a dos respuestas. La primera es que no hay nada en el texto que limitara la advertencia de Pablo para llamar  laicos.  Mi segunda respuesta es realmente una pregunta: ¿Cómo podría el apóstol requerir de los creyentes en Tesalónica que el mismo no puso en práctica? Hemos leído pasajes como 1 Tesalonicenses  4:10-11, hay una tendencia, creo, dejar su aplicación a los misioneros y pastores. Esto es en parte debido a una vista defectuosa del “ministerio a tiempo completo.” Por ejemplo, nosotros a menudo hablamos de “laicos” a trabajar detrás de las escenas en trabajos “seculares” para ayudar y apoyar misiones. Pienso que un modo más bíblico de ver el tema es esto: Cada Cristiano debe de ser un misionero a tiempo completo en cualquier parte donde él o ella este. Esto quiere decir que aun si usted nunca termia en el campo misionero la misión, usted todavía puede ser totalmente comprometido con misiones.  Usted todavía puede estar comprometido a vivir un estilo de vida misional. En todos sus escritos, Pablo parece aceptar la vida de sacrificio por la causa del Evangelio tanto normal y necesario. “La única cosa que importa,” el escribió en Filipenses. 1: 27,  “es que su ciudadanía debería consistir como el Evangelio de Cristo requiere, de modo que, si realmente yo pueda ir y verles, oiré que ustedes estáis  manteniéndose firmes en un mismo objetivo, y con un deseo que estamos luchando juntos por la fe del Evangelio.” Aquí Pablo exhorta a cada creyente a iniciar la “Gran Comisión Cristiana.” El mismo había hecho una elección consciente para negar los derechos merecidos a él cómo un apóstol y en cambio escogió una vida de sufrimiento y el trabajo constante físico a causa del Evangelio. Solamente mire la lista terrible de sufrimientos que él describe en 2 Corintios. 11: 23-29. Estas aflicciones incluidas, no sorprendentemente, “trabajos y fatigas” (v. 27) — aun otra referencia que Pablo estuvo comprometido a la auto-ayuda. De verdad, su primera jactancia con lo que se refiere a los falsos apóstoles es, “¡He trabajado duro  más que lo que ellos  tienen!” (v. 23). Le animo a leer  la serie de sufrimientos  de Pablo en 2 Corintios .11: 23-29 despacio y con cuidado. Yo podría haber esperado que Pablo dijera, “Ya que sufro tanto para el Evangelio, seguramente otros querrán aumentar su apoyo financiero de modo que yo no trabaje demasiado duro.” Esto es con precisión lo que Pablo no dijo. ¡Cuando él se jacta que él ha trabajado más duro que sus adversarios, el no está insinuando que su compromiso de auto-apoyo era un error!

A menudo oigo la crítica, “Miles de misioneros están listos para ir a alcanzar solamente si el apoyo estuviera disponible.” Esta no es la mayor necesidad en realidad de las misiones, sin embargo. Es superado por innumerable miles de oportunidades de alcanzar los millones de perdidos por el evangelismo “Tentmaking.” ¡Alabe al Señor por mi amigo que fue a Japón a servir  en “servicio cristiano a tiempo completo” como un laico! Dios, posiblemente, no está llamándote a Japón. Pero en cualquier parte donde usted vive y donde usted vaya, usted puede encontrar maneras de participación en este gran trabajo del mundo de evangelización. 

La siguiente referencia de Pablo para trabajar en 1 Tesalonicenses esta en el capítulo 5, donde él escribe (5:12-13).

Pero os rogamos hermanos, que reconozcáis a los que con diligencia trabajan entre vosotros, y os dirigen en el Señor y os instruyen, y que los tengáis en muy alta estima con amor, por causa de su trabajo. Vivid en paz los unos con los otros.

Tradicionalmente, el “trabajo” descrito aquí ha sido interpretado para referirse al trabajo espiritual de los líderes de  la iglesia. Una vez mantuve esta opinión yo mismo. Hoy estoy convencido que Pablo tenía el manual de trabajo en mente cuando él escribió estas palabras. Temprano  el había insistido que los Tesalonicenses debían de ganar sus propias vidas   “trabajando con sus propias manos” (4:11). Y aquí en 5:12-13 no hay nada en el contexto que requeriría que nosotros miremos a estos trabajadores de tiempo completo pagados por el cuerpo administrativo o planilla de la iglesia. Puedo estar equivocado, pero me parece que Pablo esta continuando su énfasis sobre la necesidad de trabajar como una expresión de nuestra fe cristiana y como un testigo de una persona extraña que son siempre desconfiados de religiosos mercaderes  cuyo  único motivo  en el ministerio es la codicia. Pablo, de hecho, fue rápido en defenderse contra tal acusación en 1 Tesalonicenses. 2:5: “Tú conoces muy bien que nosotros o venimos a vosotros con palabras lisonjeras, tampoco usamos palabras para encubrir la avaricia — ¡Dios es nuestro testigo!  Claramente, Pablo estuvo encima e reprochar  cuando esto vino a los ingresos.

Nuestro pasaje final es 2 Tesalonicenses 3:6-12. Esta absolutamente brillante en el griego. Aquí está la traducción:

Ahora bien, hermanos, os mandamos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según la doctrina que recibisteis de nosotros. Pues vosotros mismos sabéis como debéis seguir nuestro ejemplo, porque no obramos de manera indisciplinada entre vosotros, ni comimos de balde el pan de nadie, sino que con trabajo y fatiga trabajamos día y noche a fin de no ser carga a ninguno de vosotros; no porque no tengamos derecho a ello, sino para ofrecernos como modelo a vosotros a fin de que sigáis nuestro ejemplo. Porque aun cuando estábamos con vosotros os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, que tampoco coma. Porque oímos que algunos entre vosotros andan desordenadamente, sin trabajar, pero andan metiéndose en todo. A tales personas les ordenamos y exhortamos en el Señor Jesucristo, que trabajando tranquilamente, coman su propio pan.

Yo creo todo de ustedes — incluido yo mismo — tenemos que aprender a vivir el estilo de vida sobre el que leímos en este maravilloso pasaje. Si usted está viviendo para Cristo, usted debe de ser un trabajador responsable. Un codicioso, un estilo de vida despreocupada es simplemente imposible. ¿Cómo Cristianos, como podemos alguna vez estar perezosos y fallar en trabajar para suplir nuestras necesidades? ¿Cómo podemos decir que Jesús es Señor a no ser que nosotros estemos prestos para obedecer las instrucciones de Pablo en este pasaje?  Note que Pablo no excluye a los líderes de la iglesia de esta exhortación. La instrucción es clara: Aquellos Tesalonicenses quienes estuvieron aprovechándose de la caridad de la iglesia debían parar.

Este pasaje es un carbón de fuego sobre nuestras cabezas. Nuestra primera reacción, yo supongo, debería de ser doblarnos sobre nuestras rodillas en arrepentimiento. Después, necesitamos seriamente preguntarnos a nosotros mismos si esto tiene razón de apoyar a los que no trabajan por que ellos no trabajaran. Estoy convencido que los enormes recursos materiales de los Estados Unidos serian mejor usados para atender las urgentes demandas de las tareas misioneras inconclusas. Creo que 2 Tesalonicenses 3:6-12 nos enseña que todos nosotros somos responsables de  conducir ordenadamente  nuestras vidas y ganar nuestro pan diario. Es obvio que Jesús no tendrá a nadie entre sus seguidores  quien  quiera ser económicamente dependiente cuando ellos podrían sustentarse por ellos mismos.

Desde luego, no estoy hablando para personas con genuinas necesidades. Jesús obviamente ama al necesitado. A todos los que lo siguieron, El les dio un ejemplo de ayudar al desamparado. Pablo, también, estuvo enfático acerca de esto. El escribió a los Gálatas que “nosotros deberíamos recordar al necesitado…, que es la misma cosa  que he estado impaciente para hacer” (Gálatas 2:10). Para los Cristianos, entonces, no puede haber otra opción  cuando estemos frente con el necesitado de hacer todo lo que podamos para ayudarles. Pablo el mismo estuvo dispuesto a recibir temporalmente ayuda financiera  a sus ingresos cuando la necesidad lo ocasionaba. Claramente, sin embargo, esto era la excepción a la regla.

Tenemos que preguntarnos, ¿Que piensa el Señor Jesús del presupuesto económico de nuestra iglesia que son exagerados con gastos innecesarios cuando el dinero podría ir para ayudar al verdaderamente necesitado?  Una mirada a nuestros presupuestos no revela una iglesia de sacrificio dados pero a  una sociedad  de receptores. Como alguien una vez dijo, “Nosotros nos damos a nosotros mismos,”  queriendo decir que las ofrendas de nuestra iglesia son usadas sobre todo para cosas que harán nuestras vidas más cómodas.  Hay un principio en el trabajo aquí: Cristianos Egocéntricos no pueden y no podrán poner prioridades en prácticas bíblicas — prioridades como aquellas encontradas en Filipenses 2:3-4 (“Nada hagáis por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de vosotros considere al otro como mas importante que a si mismo, no buscando cada uno sus propios intereses, sino mas bien los intereses de los demás.”) o Romanos. 12:13 (“Contribuyendo para las necesidades de los santos, practicando la hospitalidad.”). El camino para auto-apoyo según Tesalonicenses requiere que nosotros voluntariamente vayamos fuera de nuestro camino y colocar las genuinas necesidades de otros antes que las propias. ¿Cuántos millones de dólares son derrochados cada año por que nosotros estamos preocupados con los lugares de placer de Egipto cuando nosotros deberíamos estar contentos con el mana del cielo? ¿Por qué, como los Fariseos, nosotros estamos consumidos con la limpieza del exterior de las vasijas y olvidando la agonía del perdido y el moribundo?

La conclusión es inevitable: Considerando las ordenes de Jesús (Mateo. 28: 19-20; Marcos 16: 15) y el ejemplo constante de Pablo,  y en vista de la condición perdida de billones de personas en este mundo, las iglesias deben dar todo por encima de necesidades básicas por la causa del mundo de la evangelización. En su conversación a los pastores de  la iglesia de Éfeso, Pablo dijo:

Nunca he codiciado la plata de nadie o el oro o la ropa. Ustedes mismos saben que con estas manos mías he trabajado para proveer todo para mis compañeros y mis necesidades. Les he dado un ejemplo que trabajando duro como esto nosotros debemos ayudar al débil, recordando las palabras que el mismo Señor Jesús dijo, “Hay mas felicidad en el dar que en el recibir.”

Pablo enseñando acerca de las finanzas Cristianas siempre ofendía a las personas. Que hace tan difícil es que no es simplemente una doctrina teológica  pero una manera de vida. Pablo fue uno de los mayores apóstoles que alguna vez vivieron, aun el no exigió sus derechos — aun menos todos sus derechos para su apoyo financiero. Es importante que nosotros entendamos que las exhortaciones de Pablo acerca del apoyo tienen sentido, solo a los que han aceptado las enseñanzas radicales de Jesús acerca del autoengaño. “Alguien que no abandona todo esto no puede ser Mi discípulo,” El dijo (Lucas 14:33). Ustedes miran, la iglesia Americana tendrá que contestar a Dios para lo que hemos hecho  con el mundo de los perdidos. El mismo Jesús exigirá una contabilidad de lo que El nos ha dado para invertir. ¿Qué tipo de administradores somos nosotros con las bendiciones que El llenado sobre nosotros? Esto, creo, es la pregunta de la hora. Le exhorto a escuchar con cuidado — no a algo que he dicho, pero a la voz del Señor Jesús como El le habla a usted a través de Su Palabra. El tiene el poder de cambiar a cualquiera que este cansado y desanimado del cristianismo y es sin miedo para tomar un paso gigantesco de fe.

June 7, 2010

David Alan Black is the editor of www.daveblackonline.com.

Back to daveblackonline